El Pequeño Soldado: Un Cuento de Valentía y Resiliencia

El protagonista, un joven muchacho, se encuentra con soldados cerca de su casa. A pesar de que su madre le advierte que se esconda, él se niega a irse, insistiendo en esperarla. Los soldados le informan que sus padres han sido asesinados y le instan a ir con ellos para estar a salvo.

El niño, temiendo por su vida, decide ir con los soldados a su escondite. Uno de los soldados lo tranquiliza diciéndole que lo protegerá y lo reclama como su hijo para calmar los miedos del niño.

El niño se separa de su madre en el caos, llamándola desesperadamente. Se siente perdido y asustado, buscando su presencia para consuelo y orientación.

Los soldados discuten su reciente misión, expresando satisfacción por haberla completado con éxito. Mencionan quemar todo y a todos según se les ordenó, mostrando falta de remordimiento por sus acciones.

Los soldados exhiben un comportamiento insensible, con un soldado bromeando sobre comer una comida mientras otro les apura para que se vayan. Muestran una falta de preocupación por las consecuencias de sus acciones.

El niño se encuentra con un desconocido armado con un rifle, inicialmente temeroso pero eventualmente afirmando su falta de miedo. El desconocido cuestiona al niño sobre lo que ve, insinuando una posible alianza o comunicación con otros.

El personal militar discute estrategias y movimientos de tropas, resaltando los desafíos de mantener posiciones y la necesidad de traer artillería. Existe un sentido de urgencia y preocupación por la presencia enemiga en el sector.

Un soldado expresa preocupación por la participación de niños en la guerra, cuestionando cómo pueden luchar contra ellos. Este sentimiento refleja un dilema moral y el impacto del conflicto en individuos inocentes.

El Erizo le preguntó al niño dónde estaba e indagó sobre su nombre y apellido. El niño, Nikolay, mencionó estar cerca de la playa y se le preguntó si era un comandante. También se le cuestionó sobre el paradero de sus padres.

La tía del niño lo tranquilizó para que no llorara, diciéndole que era un hombre y que los hombres no lloran. Mencionó que ni El Erizo ni el tío André lloraban, y luego se ofreció a buscar algo, pidiéndole al niño que la acompañara.

Un soldado informó al niño que lo encontraron en el bosque y le trajeron carne enlatada y sopa. El soldado sugirió que el niño tomara la sopa primero antes de comer cualquier otra cosa.

Jacob, conocido antes de la guerra por tener clientes en todo el mundo, envió saludos a su familia y agradeció a su hermana por los guantes y un paquete dulce. Mencionó a su prima soltera de 74 años y expresó el deseo de visitarla.

Jacob mencionó humorísticamente casarse con su hermana si cocinaba tan bien. Esto llevó a una discusión juguetona sobre quién le propondría matrimonio. También compartió su costumbre de escribir a casa antes de las batallas, actualmente pidiendo ropa para el niño.

El niño solicitó dibujos de armas, mostrando conocimientos adquiridos de Katia en Tula, conocida por sus armeros. El soldado tranquilizó al niño y prometió dibujar un tanque, un rifle o un cañón.

Soldados, incluido un cocinero llamado Petrovich, fueron presentados al niño. Se mencionó que el soldado con el brazo herido era valiente y hábil en combate. El niño preguntó por los hombres que lo encontraron en el bosque.

La enfermera tranquilizó al niño, prometiéndole dibujar un tanque a su regreso. Luego se fue, instruyendo al niño a dormir. El soldado la llamó para que le ayudara con más personas heridas.

Llegaron refuerzos, incluyendo una mujer asustada que al principio dudaba en moverse. Los soldados la llevaron al lugar a pesar de su reticencia. El niño expresó el deseo de convertirse en comandante en el futuro.

El niño compartió su experiencia de recibir una dolorosa inyección, describiendo la aguja como grande. Inicialmente quería huir, pero finalmente se quedó para la inyección.

El comandante decidió quedarse debido a su valentía, mencionando que es valiente y no tiene miedo a las inyecciones. Recuerda que los hombres no lloran, resaltando la importancia de la valentía en su línea de trabajo.

El comandante recibió una medalla por valentía, enfatizando que se le otorgó por sus acciones valientes. Orgullosamente menciona tener una pistola especial que puede derrotar a cualquier fascista en el planeta.

El comandante revela que tiene su propio tanque, expresando confianza en usarlo para derrotar a cualquier enemigo. Pregunta si la otra persona tiene un avión, a lo que la respuesta es negativa.

Hay una discusión sobre un niño llamado Shirosha, descrito como tierno e ingenioso. El comandante expresa preocupación por el bienestar del niño, resaltando los desafíos de dejarlo en un orfanato.

Los soldados ofrecen leche de cabra al comandante, enfatizando su valor nutricional y la posibilidad de hacer queso con ella. Le presentan al comandante un regalo útil durante la guerra, mostrando su cuidado y apoyo.

Un soldado regala tela a otra persona, instándola a comportarse bien. Este gesto simboliza el cuidado y camaradería entre los soldados, mostrando apoyo y ánimo en tiempos difíciles.

El orador reflexiona sobre el costo emocional de presenciar el sufrimiento de un niño, expresando un profundo deseo de protegerlo y consolarlo. La lucha interna entre la vulnerabilidad emocional y la necesidad de mantenerse fuerte en circunstancias difíciles es evidente.

Hay un miedo expresado sobre la posibilidad de perder al niño/a ante otra persona, lo que lleva a un sentimiento de impotencia y desesperación. El hablante se preocupa por no volver a ver al niño/a y el impacto emocional de tal pérdida.

El orador expresa incertidumbre sobre cómo acercarse a Good, destacando su comportamiento estricto y falta de demostración emocional. Existe un sentido de aprensión sobre interactuar con Good debido a su naturaleza severa.

Una delegación militar liderada por Igor Maximovich solicita una ametralladora para la colina y refuerzos para el flanco izquierdo para repeler los avances enemigos. Se enfatiza la necesidad de mayor potencia de fuego y posicionamiento estratégico para la defensa.

Nicolás Elvis fue solicitado por los soldados para dejar a un niño en el regimiento, ya que se habían encariñado con él. Los soldados, muchos de los cuales tenían hijos propios, encontraban consuelo en luchar por el niño. A pesar de que la decisión de Nicolás fue respetada, los soldados le pidieron que dejara al niño bajo su cuidado, ya que estaban dispuestos a luchar en su lugar debido a la inminente amenaza de las fuerzas alemanas.

Tanques alemanes fueron observados avanzando en el flanco derecho, lo que provocó una acción inmediata y comunicación entre los soldados. La situación requería vigilancia y preparación ya que la amenaza planteada por las fuerzas alemanas se volvía más inminente.

Un soldado llamado Andrey regaló unos binoculares a otro soldado, introduciéndolo al concepto de equipo militar. El receptor expresó gratitud y reconoció la importancia de comprender las armas y los peligros asociados con las armas de fuego en el ejército.

Un momento conmovedor ocurrió cuando un soldado expresó cuidado y preocupación por otro, ofreciéndose a adoptarlo como su hijo. El intercambio emocional resaltó el profundo vínculo formado entre los soldados en medio de las difíciles circunstancias de guerra.

Un soldado encomendó a otro la tarea de confeccionar un uniforme militar para un niño, enfatizando la importancia de asegurarse de que le quede bien. La atención al detalle en la preparación del uniforme mostró la dedicación y cuidado que los soldados tenían por el bienestar del niño.

Un soldado fue evaluado por su habilidad para vestirse rápidamente, resaltando la importancia de la eficiencia y la preparación en operaciones militares. Las habilidades de vestirse rápidamente del soldado fueron evaluadas como un aspecto crucial para estar preparado en situaciones de combate.

Un soldado admira su uniforme, comentando sobre su calidad y apariencia.

Hay preocupación por la seguridad de Katia ya que una amenaza de bomba se cierne, causando ansiedad entre el grupo.

Se enfatiza la importancia de creer en la victoria y mantener la moral, con un recordatorio de enfocarse en el objetivo de ganar la guerra.

Un soldado recibe una carta de su familia expresando amor y apoyo, mencionando el bienestar de una vaca que da mucha leche.

Los soldados piden a un niño joven que cante para ellos, brindando un momento de alegría y distracción de las duras realidades de la guerra.

Se hacen planes para instalar otra carpa para los heridos debido al hacinamiento, mostrando cuidado por los soldados heridos.

Un soldado se ofrece a ayudar a montar otra tienda para los heridos, mostrando disposición para apoyar los esfuerzos médicos.

Un padre y un hijo comparten un momento de gratitud por el uniforme del soldado, resaltando la importancia de apreciar las pequeñas cosas en tiempos de guerra.

Un soldado expresa anhelo por su familia, reflexionando sobre los sacrificios y el desgaste emocional de estar lejos de sus seres queridos durante la guerra.

Un joven soldado recibe la importante misión de distribuir el correo entrante, demostrando la confianza y responsabilidad que le otorgan sus superiores.

El ordenanza, identificado como el ordenanza del regimiento, llega para recibir el correo según las órdenes del comandante. Se le informa que ahora es la persona más importante después del comandante del regimiento y el cocinero, con soldados dispuestos a bailar para él.

El ordenanza entrega el correo a los soldados, incluyendo una carta para uno de ellos. Se produce una interacción juguetona donde el soldado pide la carta después de bailar, mostrando un momento alegre.

Hay escasez de suministros, específicamente gasolina que los vehículos americanos no pueden procesar debido a su fortaleza. Esto lleva a una solicitud de más suministros, resaltando los desafíos enfrentados durante la guerra.

El alcohol se utiliza para diversos fines, desde limpiar motores de automóviles hasta la artillería. El comandante enfatiza la importancia del alcohol para las tareas de mantenimiento, mostrando ingenio en la utilización de los recursos disponibles.

El soldado Sergey es elogiado por capturar a dos infiltrados alemanes ajustando la mira del artefacto fascista. La exitosa captura demuestra la vigilancia y efectividad de los soldados para contrarrestar las amenazas enemigas.

El ordenanza, a pesar de ser tratado como un 'bebé' por otros, afirma su identidad como soldado y desea ser reconocido como tal. Expresa un deseo por un nombre de oficial y un arma, resaltando su aspiración por un papel más significativo en el ejército.

El padre informa al niño que tendrá un nombre oficial y un arma cuando crezca. Presenta un documento oficial autorizándolo a ser el padre del niño y al niño a ser su hijo. Planean visitar a la tía Katia, quien los cuida profundamente.

El padre y el niño corren a encontrarse con la tía Katia junto al río. Al llegar, el niño le presenta a la tía Katia flores, pero ella prefiere hierbas como ortigas y llantén. La tía Katia limpia la cara del niño e intercambia las flores por su ropa.

El niño llama ansiosamente a su padre, quien llega entre aplausos. El padre lleva municiones al niño y le aconseja que vaya al búnker del comandante para estar a salvo.

El comandante da órdenes para que se realicen reparaciones a pesar de la posición expuesta debido a los francotiradores. Se le indica al soldado que vaya al búnker del comandante, enfatizando la importancia de seguir las órdenes.

En medio del caos, el niño busca orientación sobre qué hacer con un cable. Se le indica al niño que conecte los dos extremos del cable, lo que lleva a una comunicación exitosa con el comandante.

El padre explica las constelaciones de la Osa Mayor y la Osa Menor al niño, simbolizando una familia esperando que el padre regrese de la guerra. Expresan la esperanza de que el padre regrese a casa sano y salvo, enfatizando las complejidades del amor y las relaciones.

El niño busca urgentemente ayuda para su padre, quien está muy enfermo y no puede comer, beber ni dormir. La situación es crítica, lo que ha provocado una carrera en busca de asistencia médica.

El orador se presenta como el entrenador de perros, responsable de cuidar, alimentar y entrenar a los perros como si fueran sus propios hijos.

Los perros son identificados como los perros del regimiento, específicamente bajo el mando del hablante que se refiere a sí mismo como su comandante de cierta manera.

El orador explica que los perros están entrenados para ayudar a los soldados heridos lamiendo sus caras para recuperar la conciencia y sentándose al lado de las personas heridas con un botiquín médico hasta que llegue una enfermera.

Un personaje expresa un deseo que ha tenido por mucho tiempo de transmitir sus sentimientos, insinuando una profunda conexión emocional y un sentido de vacilación.

Hay una revelación de profundo afecto hacia otra persona, indicando que la persona es muy amada.

Un mensaje del alto mando es recibido, indicando que partirán al día siguiente.

Una cálida reunión familiar tiene lugar, con personajes dirigiéndose mutuamente con respeto y compartiendo una comida juntos.

Los personajes discuten el impacto de una bomba aérea alemana que penetró en su casa pero no explotó, lo que llevó a que se hicieran reparaciones.

El orador menciona el término 'tusique' como el nombre para los perros inteligentes, resaltando sus habilidades y características únicas.

Un personaje expresa el deseo de participar en la guerra, mencionando su deseo de cazar lobos después de que termine el conflicto.

Surge una situación urgente donde el comandante necesita atención médica, pero insiste en priorizar el cuidado de los soldados heridos.

Sergeking solicita permiso para informar al comandante para una misión de combate. El comandante le instruye inspeccionar el equipo y los uniformes en la segunda tropa.

El comandante forma a los soldados para una inspección, abordando problemas como botas rotas y asignando tareas en consecuencia.

El soldado Cirosas informa al comandante que más de la mitad de la tropa ha completado las tareas asignadas, lo que lleva a elogios y la promesa de ser el primero en recibir suministros.

Un soldado solicita la aprobación del general para que su padre y Katia se casen, mostrando un lado personal en medio de sus deberes militares.

Discusión sobre la división que pronto recibirá una bandera de guardias, simbolizando honor para aquellos que lucharon y siguen luchando. Significa reconocimiento por sus sacrificios y esfuerzos.

Los soldados son felicitados por convertirse en guardias, lo que significa un reconocimiento bien merecido por su servicio y dedicación.

Surge una situación urgente donde se necesita a los soldados de vuelta en el búnker, enfatizando la necesidad de acción rápida y compostura en circunstancias desafiantes.

El momento emocional de un padre herido, resaltando la determinación y fuerza del soldado ante la adversidad.